El agua es un bien común y su importancia para el desarrollo de las personas queda patente con el reconocimiento por parte de la ONU del “derecho al agua potable y el saneamiento” como un derecho humano esencial.

En línea con este concepto sobre el agua de grifo, los operadores españoles han tenido siempre un acentuado sentido de servicio público. Además, han demostrado una sensibilidad especial hacia los colectivos más desfavorecidos, que se ha acentuado en los momentos más duros de la crisis económica. Esta sensibilidad se ha materializado a través de estructuras tarifarias específicas y los denominados Fondos de Solidaridad.

No obstante, el precio medio del agua de grifo en España está por debajo de la media europea. La ONU recomienda como límite máximo del gasto en agua por familia, el 3 % del presupuesto familiar y España se sitúa muy por debajo de dicha cifra.

Al ser un sector cuyo recurso proviene directamente de la naturaleza, la concienciación al respecto del cuidado del medio ambiente es absoluta. En consecuencia, los operadores buscan la forma de reducir su huella de carbono día a día y colaboran activamente junto con otros sectores, hacia la transición ecológica y energética.

En este sentido, AGA pide insistentemente a las autoridades competentes, la modificación o eliminación de los impuestos que obstaculicen el aprovechamiento energético de las instalaciones. El potencial del ciclo urbano del agua de cara a la economía circular es enorme, es por ello que desde la asociación se defiende que el sistema impositivo ha de ir siempre orientado a fomentar el aprovechamiento energético. Sólo de esta manera se alcanzará un desarrollo basado realmente en una economía verde.

Un ejemplo claro de que el conjunto de operadores españoles de agua urbana apuesta por el medio ambiente, es que la práctica totalidad de los mismos, tienen implantado un Sistema de Gestión Ambiental según la norma internacional ISO 14001, lo que les posiciona como empresas socialmente responsables.

Conscientes de la importancia del buen funcionamiento de las infraestructuras, las empresas realizan grandes esfuerzos inversores en el mantenimiento del correcto estado de los sistemas de abastecimiento y saneamiento.

Preocupada por el bienestar de las personas que forman parte del sector, AGA mantiene grupos de trabajo permanentes relacionados con aspectos tan relevantes como: empleo, formación, prevención de riesgos laborales, responsabilidad social corporativa, etc. y colabora en estos puntos fundamentales con asociaciones y fundaciones, tanto privadas como públicas, como puede ser la FUNDAE, el SEPE o la Fundación Estatal para la Prevención de Riesgos Laborales.

En cuanto a las condiciones laborales, AGA -en representación de las empresas del sector- participa, junto con las organizaciones sindicales correspondientes, en la redacción del Convenio Colectivo Estatal de las industrias del ciclo urbano del agua. Es importante remarcar que, incluso la retribución más baja reflejada en el mencionado convenio, está muy por encima del SMI.